Mi Boda en tiempos de Covid

Mi Boda en estos tiempos de Covid. Una montaña rusa de emociones

Como os comente en el post anterior, Bodas en tiempos de «guerra», yo era otra novia del 2020 que ha tenido que cambiar sus planes para el 2021. 

Durante este tiempo he experimentado varios sentimientos, como rechazo, incertidumbre o angustia y ahora por fin tranquilidad.

Los primeros días de confinamiento pensé como mucho de vosotros que sería algo temporal, esa esperanza de poder celebrar mi boda la tuve hasta justo un par de días antes de que tomáramos la decisión de posponerla para el año que viene.

He de decir que un tiempo más tarde, cuando la cosa se puso seria, empecé a ser un poco más consciente de que esto iba para largo y que era algo serio, por lo que me entró el agobio, la frustración y el desánimo pensando que todo el año bonito de preparación, todos esos planes especiales que rodean la organización de una boda; como las pruebas de vestido con mamá… la despedida de soltera con las amigas de toda la vida… la búsqueda de zapatos… de alianzas… me las iba a perder.

Entré en una fase un poco triste, todo el mundo me preguntaba por la boda (como es lógico) y yo con una sonrisa en la boca y el corazón encogido les contestaba: » todo en orden, vamos para adelante».

Estaba cegada, no queria verlo, no quería tener noticias del «exterior», no quería saber cuantas bodas se cancelaron en mi entorno, no quería que nadie me preguntara más sobre el tema. 

Me di cuenta que no sólo nosotros estábamos agobiados, si no que nuestras familias e invitados también, les teníamos a todos con la incertidumbre y pendientes de una decisión que todo el mundo sabia, solo que nosotros no queríamos aceptarlo.

Pero hablando con mi madre, con mi pareja y amigos, me di cuenta que en la vida hay cosas peores, como que te falte un ser querido o muchas otras cosas.

Por eso a día de hoy vuelvo a decir que aplazarla para el año que viene ha sido la mejor decisión.

No queria estar preocupada por la seguridad de los míos, si no preocuparme en hacer una buena fiesta para que todos la disfruten.

En el post anterior de Bodas en tiempos de «guerra» ya os conté que aplazamos la boda pero sin fecha, ya que es una ceremonia católica y las Iglesias hasta el momento estaban cerradas. 

El haberlo aplazado me dejó más relajada aún sin saber que fecha seria la siguiente… empezaron las ganas de seguir adelante, de poder organizar la boda que soñábamos… solo quedaba esperar a que abriera la iglesia para poder compaginar las fechas.

Pero bonit@s tengo algo que contaros….

YA TENEMOS NUEVA FECHA!!!

Después de unos meses duros… os puedo decir, que vuelvo a soñar!! 

Ahora vuelvo a tener ese hormigueo en la barriga, vuelvo a estar ilusionada mirando y buscando cosas bonitas para el día, vuelvo a tener esa energía que tenia la primera vez, cuando supe que me casaba. 

Como os comenté en el post anterior:

seremos más excusas para brindar y celebrar momentos con los nuestros 

un año más de ilusión… y es que que bonita la vida cuando se vive con ilusión…

Por supuesto no todo es de color de rosa, os preguntareis si me han cuadrado todos los proveedores con mi nueva fecha…. la respuesta es NO. 

Pero os tengo que confesar que han sido de lo más sensatos, amables y cooperativos. 

Ahora toca seguir buscando y organizando con mucha fuerza y actitud! 

Aprovecho este post para hacer un Challenge, #savethedatepillowchallenge

Me gustaría contaros en otro post el porque decidí hacer este Save the date diferente y gracioso. 

Si os apetece, las que tengáis que hacer un Save the date y os animéis con el Challenge, enviadme los vuestros a través de IG  (etiqueta o por mensaje) y/o por email a: macarena@sursoulweddings.com y os publico en el post que haga sobre el mío. 

Ahora sigamos soñando…! 

Os leo!